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martes, 21 de abril de 2009

ANECDOTAS INTERESANTES DE LA FERIA DE ABRIL


LOS COMIENZOS DE LA FERIA DE ABRIL.
EVOLUCIÓN HASTA SU EMPLAZAMIENTO ACTUAL (1846-1973)

Los orígenes de nuestra Feria de Abril se encuentran en un 25 de agosto de 1846 en que Narciso Bonaparte y José María de Ybarra firmaron una proposición que presentaron al Cabildo Municipal pidiendo autorización para que durante los días 19, 20 y 21 de abril se celebrara una feria anual.
El Cabildo Municipal vio con buenos ojos la iniciativa del vasco y del catalán -curiosamente no fueron andaluces los precursores-, secundada por numerosos ganaderos y agricultores. Así en 1847 se celebra la primera Feria de Abril.


El Cronista Oficial de la Ciudad, el Sr. Velázquez y Sánchez, dejó escrito que "para inaugurar la importante concesión en los días 18, 19 y 20, el Ayuntamiento acordó una Exposición de ganados, con adjusicación de premios en concurso, de toros, bueyes, carneros, caballos sementales y yeguas, admitiéndose a optar al regalo de unas espuelas de plata a jinetes de caballos de escuela española.
Concedidos a los ganados los pastos gratuitos de Tablada y el Prado de San Sebastián, se construyeron dos abrevaderos o pilones en San Bernardo y frente al foso de la Fábrica de Tabacos, situándose un café y repostería en tienda espaciosa para comosidad de tratantes corredores y dependientes de los ganaderos, al cuidado de su negocio; instalándose Juzgado especial en la caseta que el Municipio erigió a la salida de la Puerta de San Bernardo.


Desde dicha puerta a la inmediata de la Carne (de Min-Hoar en lo antiguo) se establecieron en dos hileras puestos de juguetes, frutas y dulces, y en la acera del Prado, desde el Tagarete hasta San Bernardo, las tiendas de buñolería, bodegones y tabernas; hallándose acomodadas en la calle Nueva (San Fernando), en zaguanes de sus casas, joyerías, roperías, despachos de efectos de modas, novedades y exhibiciones; repartiéndose por los contornos del Prado las máquinas giratorias de caballos y calesas, cosmoramas y el siempre terrible aporreador Don Cristóbal Polichinela con su inseparable Doña Rosita.

El segundo y tercer día de Feria fueron lluviosos, pero se amplió por otro más el mercado. Conviene destacar que en el programa de la propuesta inicial se indicaba que el 19 de abril de 1847 se concedería un premio de cuatro mil reales de vellón al que presentara el buey de menos de cuatro años que pesara mayor número de libras sobre mil; otro premio de igual cantidad, al mayor buey de cualquier edad. De dos mil reales al mejor lote de diez carneros de dos años; otro igual al lote de diez carneros merinos de mejores lanas. Uno de seis mil reales al mejor toro que se eche en la corrida del día veinte, y otro premio igual al caballo más corredor en la carrera a verificar el día 21 de abril.


Si atendemos a lo que dejó escrito el Cronista, el primer año la Feria contó con tiovivos, bodegones, calesitas, buñoleras, diversos puestos y hasta con una corrida de ocho toros, de las ganader&ias de Taviel de Andrade y Curro Cúchares, para Lavi, Juan Lucas Blanco y Manuel Trigo.


Curiosamente en 1848, la Feria se celebró los días 17, 18 y 19, coincidiendo con Lunes, Martes y Miércoles Santo, algo impensable en nuestros días y que fue posible por aquel entonces porque ni el Lunes, ni Martes hacían Estación de Penitencia, s&olamente salían las de Amargura y el Amor, el Domingo de Ramos.


En 1850 acudieron a la Feria más de sesenta mil cabezas de ganado. Se expidieron licencias para 15 puestos de buñuelos, 34 de turrones y avellanas, 93 para tabernas y para agua.
En 1856 se pensó en trasladar la Feria al Campo de Marte (de la Plaza de Armas a la Barqueta) y se llegó a llevar el ganado al Prado de Santa Justa y el Cuarto de las Payas, frente a San Juan de Aznalfarache (a orillas del Guadalquivir).


1863 fue el año en el que el Circo Price acude por primera vez a la Calle del Infierno.


En 1864 se queman los primeros fuegos artificiales.


El cambio del alumbrado antiguo de petróleo, por el "moderno" de gas tiene lugar en 1866.


1870 es un duro año políticamente hablando, pero la Feria dura dos días más.


La primera lámoara eléctrica visita la Feria en 1874.


1877 representa el primer año en el que se instalan farolillos de papel. La Reina Isabel II acude a la Feria y disfruta de su ambiente.


En 1885 lo destacable fue que a lo largo de la calle San Fernando se colocaron treinta y cuatro arcos con globos de cristal, que a su vez tenían en su interior luces de gas ardiendo. El efecto fue muy vistoso y llamativo.


1893 representa el año en el que se montan las primeras casetas de los grandes casinos y círculos sevillanos.


En 1894 se hizo la primera convocatoria para el concurso del cartel anunciador de la Feria de Abril. Lo ganó por primera vez Francisco Candela, su premio 500 pesetas.


En 1896, y más concretamente el 18 de abril, se inauguró la famosa pasarela de hierro. En un principio fue iluminada por 798 luces de gas y un arco voltaico, de batería en su cúspide. Fue protagonista de una época, hasta que en 1920 fue demolida. Sus 81.297 kilos de hierro fueron vendidos a precio de chatarra (dos reales el kilo) a un industrial almeriense.


El Círculo Mercantil estrenó caseta de estilo japonés en 1904. La decoración era de claro estilo nipón, incluso con sombrillas orientales. Ese mismo año los hermanos Alvarez Quintero junto con un grupo de ateneístas, montaron "Los Perros", una caseta que simbolizaba la entrada de un cortijo. Lograron un gran reconocimiento y elogios con su idea, ya que las casetas empezaban a tener matices sevillanos, alejándose de frivolidades orientales.


Fue en 1914 cuando la Feria dura ya cinco días. el primero de ellos se aprovechó para inaugurar el Parque de María Luisa.


En 1916 los Reyes Don Alfonso XII y Doña Victoria Eugenia visitaron por primera vez la Feria de Sevilla.


Los dibujos del pintor Gustavo Bacarisas de las pañoletas unificadas de las casetas del Real son de 1919. Conviene destacar que esta decoración ha marcado un estilo hasta hoy en día.


La Feria de 1930 coincide con la Esposición Iberoamericana y representa la primera vez que se celebra en su recinto del Sector Sur, trasladándose fuera del Prado.


El 14 de abril de 1931 se proclama la Segunda República y en sólo tres días el Ayuntamiento tuvo que hacer numerosas banderas tricolores. La Guerra Civil provoca la suspensión de los festejos. Lo único que se celebró fue el mercado ganadero. La década de los 40 se caracteriza por la penuria económica. La posguerra española está caracterizada por la escasez de alimentos y el racionamiento. La Feria de Abril pierde brillantez.


Es en 1949 cuando se instala la primera portada en la Avenida del Cid.


Desde 1953 la Feria dura seis días.


1964 fue el año del tristemente célebre incendio en el Real. Fueron destruídas 64 casetas, numerosos los heridos y hasta falleció un anciano.


El príncipe de Mónaco y su esposa Grace visitaron la Feria de Sevilla en 1966. También la visitó la viuda del presidente de los Estados Unidos, Kennedy.


1968 fue el año en el que los actuales Reyes de España visitaron el Real de la Feria por primera vez.


Un año muy importante en el devenir futuro de la Feria fue 1973. El 30 de abril de este año, la Feria abandona el Prado de San Sebastiáan y se traslada al emplazamiento actual en el barrio de Los Remedios. Con el transcurso del tiempo la realidad superó las previsiones y el recinto actual se ha quedado pequeño. Son más de cuarenta mil metros cuadrados los ocupados y más de un millar las casetas existentes, lo curioso es que es similar el número de las peticiones al Ayuntamiento para instalar casetas en el recinto ferial.


En resumen, la Feria de Abril es una tradición que paraliza Sevilla durante una semana y que provoca que una parte importante de la actividad de la ciudad se lleve a cabo en las numerosas casetas del Real , punto de encuentro no ya de ganaderos que venden sus productos, sino de familias enteras que viven de una manera muy especial la más importante Feria del Mundo, la Feria de Sevilla.


Texto extraido en su totalidad de andalunet.net y escrito por D. Antonio Burgos.

lunes, 13 de abril de 2009

LA FERIA DE ABRIL Y SUS ORIGENES

La palabra "feria" proviene del latin feriae y la usaban los romanos para señalar fiestas y días de descanso para dedicarse al culto religioso y festejos que se celebraban.


Alfonso X "El Sabio", constituye en Sevilla a mediados del siglo XIII dos ferias al año (abril y septiembre) con una duración cada una de 30 días.

Al ser frecuentada por mercaderes del exterior que abastecían la feria con sus propias mercancías, tuvieron que crear puestos aduaneros donde se controlara todo el material que se quería introducir en la feria. Los puestos se situaron en Huelva, Cádiz, Vejer, Sevilla y Jerez.


La Feria de Abril se creó como tal el 25 de agosto de 1846 por D. Narciso Bonaplata (catalán) y D. José María de Ybarra (vasco). Tuvieron que realizar una propuesta que llevaron al Cabildo Municipal pidiendo que autorizaran su celebración durante los días 19,20 y 21 de Abril y que fuera de carácter anual. Este permiso les fue concedido por el alcalde de aquella época el Sr. Conde de Montelirio.

Este alcalde cede ante la petición pensando que nunca llegaría su celebración a buen fin, ya que existían por entonces otras dos ferias muy próximas a estas fechas, siendo una de ellas la ganadera de Mairena del Alcor (cuya Feria es la más antigua de Andalucía (1.441) y se celebra una semana antes que la de Sevilla).


En marzo de 1.847 la Reina Isabel II concedió a Sevilla el privilegio de Feria celebrándose un mes más tarde la primera de la ciudad con la duración estipulada anteriormente de 3 días. La reina visitó la feria años después (1.877) teniendo como acompañante al alcalde Ybarra.


La primera feria ganadera se ubicó en el Prado de San Sebastian, ya que en esa época estos terrenos se encontraban a las afueras de la ciudad. El único edificio que se encontraba ubicado junto a la feria era y sigue siendo la Fábrica de Tabacos (hoy día la Universidad de Sevilla) y aún no existían ni la Plaza de España ni el monumento de Rodrigo Díaz de Vivar "El Cid Campeador".


En sus inicios contó con 19 casetas y fue tan grande el éxito obtenido que años después (1950) tuvieron que separar lo que era la zona de mercaderías del espacio usado para la diversión.


La afluencia de visitantes era tan numerosa que el Ayuntamiento se vio obligado a ampliar poco a poco el lugar de celebración y se creó en 1.890 el primer cartel oficial anunciador de la feria y en 1.910 se difunden folletos divulgativos.

En el año 1.914 se pasa de 3 días a 5 y en 1.952 ya se fija en 6 días festivos.


A partir de los años 20, la feria se empieza a parecer lo que podemos ver hoy día, una ciudad artificial y efímera de sólo unos días de duración donse se instalan casetas para el regocijo de los visitantes foráneos y autóctonos, vendedores, juerguistas, curiosos, artistas y famosos.


Durante años, el recinto de la feria se conoció como "La Pasarela" , debido a una estructura existente que era utilizada para cruzar la calle, hasta el año 1.973 que fue preciso reubicar las casetas por las distintas demandas de feriantes, organismos y público, el espacio se quedó pequeño y su lugar de asentamiento fue el del barrio de Los Remedios, una zona casi rectangular con una medida de 1,5 km. por 600 metros cuadrados.
Este lugar es conocido como el "Real de la Feria", con calles que fueron bautizadas con nombres de toreros de todas las épocas, adornadas de farolillos de distintos colores que iluminan la oscuridad de la feria cuando cae la noche.
Actualmente, al existir una gran demanda para la creación de nuevas casetas por la afluencia de asistentes, se espera que en un breve plazo de tiempo, cambie de nuevo de ubicación para instalarla en un lugar de mayores dimensiones, por lo que se estudia desde hace varios años ubicarla en lo que se conoce como "El Charco de la Pava".